El domingo día 10 de marzo, se celebro el Besamanos a la Virgen de la Soledad en la Parroquia de
San Francisco de Asís. Para el mismo, la Junta de Gobierno preparo un altar
presidido por la Santísima Virgen, vestida con su mejor manto, el bordado en oro
sobre terciopelo negro en el año 1938 por las Reverendas Madres Adoratrices de
Córdoba. Sobre un dosel de tela roja, estaba la Cruz de Guía con un sudario
color marfil. Es el símbolo de la Virgen de la Soledad, la Cruz ya sin su Hijo,
y Ella sola llorando su muerte. Fueron muchísimas las personas que pasaron a
besar la mano de la Virgen.
El jueves día 14 de marzo, comenzó el Solemne Triduo en
Honor de la Virgen de la Soledad, presidido por el Rev., P, Ladislav Prosk. La
Sagrada Imagen estaba sobre un dosel de tela roja, rematado con un palio
dorado, a sus pies dos ángeles portaban dos símbolos de la Pasión del Señor, la lanza con la que el soldado
Longinos atravesó su costado, y los tres clavos con los que el Redentor fue sujetado
al madero.
Desgraciadamente, el domingo a la hora de llevar a cabo el
traslado de la Santísima Virgen desde la Parroquia hasta su Santuario, de nuevo
hizo presencia la lluvia, incluso tormenta, por lo que se suspendió este,
rezándose un misterio del Santo Rosario.
Este año se ha estrenado el dosel para los cultos, se ha
estrenado el dorado del penacho, la restauración de la Cruz de Guía, haciendo
destacar que todo este trabajo se ha llevado a cabo por los miembros de la
Junta de Gobierno y por algunos hermanos cofrades, que han querido colaborar en
esta tarea.
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